Seguro que en tu recetario familiar cuentas con recetas de verano fáciles y ricas con las que refrescarte y combatir las altas temperaturas sin complicarte demasiado. Por si te apeteciera renovarlas y probar cosas nuevas, aquí tienes varias ideas que pueden servirte de primer plato, de segundo, de postre y ¡hasta de sobremesa!
Crema fría de aguacate
Empecemos por el principio. Gazpacho, salmorejo y cremas frías son platos indispensables en esta época del año. La crema fría de aguacate de Endless Meal es una de esas recetas de verano fáciles que tienes que probar sí o sí. Se prepara en pocos minutos, tiene un sabor muy fresco y una textura cremosísima. Cilantro, zumo de limón, cebollas verdes y ajo proporcionan la cantidad justa de sabor para completar al aguacate sin sobrepasarlo.
Milhojas de sandía, jamón y mozzarella
La siguiente propuesta viene en forma de ensalada de sandía y recuerda a aquel emplatado en forma de sandwich que te enseñaba hace tiempo. La presentación en forma de milhojas funciona estupendamente con esta fruta, ya que es fácil sacar las lonchitas planas. Además de resultar muy práctico, el detalle de la banderita (puedes hacerlo tú misma) le pone el broche de oro a esta original presentación.
Ensalada de garbanzos, pepino y menta
Otras de las ensaladas indispensables del verano son las de legumbres, en concreto la ensalada de garbanzos. Además del tomate, los pepinos cortados en media luna y la menta dan sabor y frescura al plato, aunque si hay un elemento realmente interesante es el dátil. Suaves y masticables, contrastan perfectamente con el queso de cabra y el aderezo de limón y aceite de oliva condimentado con comino.
Ensalada de cuscús y tomates
Si prefieres algo de menor tamaño, aquí tienes el cuscús. Desde que lo descubrimos hemos aprendido a utilizarlo en muchas recetas, especialmente en ensaladas. Aunque puedes utilizar únicamente tomates frescos, aquí se han combinado con tomates asados para crear una textura y sabor distintos.
¿Qué más lleva? Garbanzos tostados para el toque crujiente, pimentón ahumado que resalta los tomates dulces, aceite de oliva, zumo de limón, ajo, pepinos para el toque fresco y queso feta. Además, cultivar hierbas aromáticas en casa te asegura el éxito de tus recetas, en este caso tomillo y albahaca.
Ensalada de pasta y fresas
Y como no hay dos sin tres, aquí tienes una ensalada de pasta con frutas. Resulta tan apetitosas que apena necesitan acompañamiento. Unos lacitos u otra pasta corta, albahaca, mozzarella, crema de vinagre balsámico de módena y ¡lo tienes! ¿Un truco? Estará más buena si dejas la pasta al dente.
Ensalada sofisticada de pera
Dentro de todos los emplatados de ensaladas que he visto, este es uno de los que me parece más tentador. ¡Y es muy fácil! No tienes más que hacer tres o cuatro cortes en la pera y después quitarle el corazón con un cuchillo de cocina. Píntala con zumo de limón para evitar que se oxide. Manteniendo su posición vertical, rellénala con los ingredientes de la ensalada. Una vez montada, añade un poco de miel y ¡a comer!
Quiche de queso de cabra y calabacín
Después de pasar todo el día en la playa, apetece reunirte con los tuyos y picotear algo fácil pero rico. Las quiches siempre son una buena idea, y esta es una de las más buenas. El contraste entre el suave calabacín y el intenso sabor del queso de cabra siempre funciona. La receta es de Directo al Paladar.
Macedonia de frutos rojos
En verano no pueden faltar recetas de helados caseros con fruta natural ni, por supuesto, las macedonias. Existen versiones sencillas, más complicadas, con salsas, sin ellas, mezcladas o separadas armoniosamente. Aquí encontrarás 10 propuestas riquísimas como esta que, además de ser perfecta para el postre, resultará deliciosa como plato fuerte de un desayuno con frutas.
Café bombón frío
Y si eres cafetera, no podrás concebir una comida sin su correspondiente café frío. Un café bombón al que puedes añadir leche si quieres, y semillas de cardamomo para aromatizarlo. ¡Habrá que probar!