Hace tiempo que sopeso la posibilidad de utilizar papel pintado de imitación ladrillo para una de las paredes de casa. Creo que es una magnífica opción para darle un aire más auténtico, pero no acabo de atreverme. Así que, además de querer compartir contigo estas ideas, una de las finalidades de este post es el autoconvencimiento de que ha llegado el momento de dar ese paso… ¿lo conseguiré?
Si a ti también te atrae decorar con papel pintado pero prefieres otro tipo de estampado, sigue leyendo para ver cómo lograr un efecto ‘uau’ y no un ‘oh oh’.
IDEAS PARA ACERTAR CON EL PAPEL PINTADO
Si te decantas por un papel pintado con mucho color, necesitarás un color base para textiles y muebles lo más neutro posible (blanco, hueso, beige, gris). Por su parte, el papel pintado en esos tonos neutros resulta ideal para combinar con mobiliario y suelo oscuro ganando en armonía y calidez.
Las rayas son uno de los estampados clásicos del papel pintado… ¡nunca pasan de moda! Las verticales, siempre que sean delgadas, son ideales para espacios de techos bajos puesto que dan sensación de altura.
Aunque en decoración tú tienes la última palabra, un buen punto de partida es apostar por toques de rojo para zonas comunes (el tono caldera es de mis preferidos); naranja y violeta para salones o cuartos de juegos; y verde o azul para dormitorios.
Juega con los distintos papeles pintados para conseguir distintos estilos deco. ¿Te gusta el estilo industrial? Decántate por un papel que imite el ladrillo visto. ¿Eres una apasionada de Oriente? Echa un vistazo a este post sobre el estilo oriental (¡te enamorarás de esos papeles!). Quizá te apetezca un punto exótico… grandes hojas verdes te trasladarán a entornos tropicales convirtiendo tu salón en un frondoso paraje.
El papel pintado te ayuda a focalizar la atención así que utilízalo para darle más protagonismo a la pared que más te interesa: la más amplia del recibidor, una de las del pasillo o la del cabecero de la cama.
>EL FACTOR SORPRESA
Una de las ventajas del papel pintado es que realmente puedes ponerlo donde quieras. Sorprende a todos empapelando alguna parte de la cocina (¿la zona de comer quizá?) con un elegante patrón brillante como éste. Eso sí, antes de lanzarte a la aventura consulta con el fabricante sobre sus peculiaridades.
A modo de curiosidad, te diré que todas las imágenes que ilustran este post pertenecen a la misma casa reseñada en Hus & Hem, ¿qué te parece? Desde luego es sorprendente cómo combina distintos tipos de papel pintado logrando una mezcla armoniosa. ¿El secreto? Utilizar un papel de color o estampado acorde con los textiles de la habitación en cuestión, encontrando un hilo conductor que le dé sentido. ¡Feliz búsqueda!
6 comentarios
Soy la fan numero 1 del papel pintado y después de leer tu post aún más!!! Nosotros hemos puesto papel pintado en una habitación y ha quedado tan espectacular!!!! Gracias por compartir, linda!!!
Hola, María: Gracias a ti.¡Os tiene que estar quedando una casa preciosa! Un besazo!
Me encanta el papel pintado y cada vez que veo una pared con uno de ellos (con las preciosuras que hay) me digo que tengo que ponerlo en casa, pero como me gusta cambiar frecuentemente de deco, pienso que será un lío quitarlo y me quedo sin ponerlo. Yo creo que tengo un trauma de la infancia jajajaa. Recuerdo la que se lió en casa de mis padres cuando quitaron los suyos..
Besitos.
María
Cuánto nos marca la infancia, ¿verdad? Parece increíble que hasta a cuestiones de decoración lleguen sus lazos. Te entiendo perfectamente pero tampoco te quedes con las ganas. ¿Y si pruebas en una pared más pequeñita? Un beso!
Me encantan: mis favoritos los de rayas, tropicales y por supuesto, ladrillo!!!
Un besazo
Hola, Arántzazu: ¡Eres una gran aficionada al papel pintado! Coincidimos sobre todo con el ladrillo… ¡queda bien con todo! Un abrazo!