Uno de los grandes problemas asociados a la llegada de la estación estival, aparte de los mosquitos, es el de la dificultad para conciliar el sueño y dormir plácidamente y sin interrupciones durante toda la noche. El calor hace que algunas noches sean realmente insoportables, con evidentes consecuencias en nuestro bienestar y nuestro estado de ánimo.
Una forma de intentar descansar mejor es elegir las mejores sábanas para dormir bien en verano, para lo cual hay que conocer los tejidos más adecuados. Los expertos de Dalfilo, una startup innovadora que está revolucionando el sector de la ropa de hogar, te cuentan cuáles son, explicando las características y propiedades de cada uno de ellos. Para ello, han elaborado unas fichas de evaluación, comparando algodón, percal y satén.
Percal: transpirabilidad y suavidad
El percal es un material obtenido del procesamiento del algodón. Es resistente y ligero al mismo tiempo. El tejido denso le da a estas sábanas un peso medio que retiene el calor en invierno y brinda frescura en verano, por lo que las sábanas de percal son transpirables y perfectas para cualquier estación.
- Elaboración. El algodón percal es un tejido especialmente fino, obtenido a partir del algodón pero con hilos más finos y de mejor calidad. En el caso de las sábanas de percal, las características técnicas incluyen la cantidad de hilos por centímetro cuadrado: cuanto más finos sean, mayor será la cantidad de hilos utilizados y la calidad del tejido.
- Textura. En contacto con la piel, el percal se siente delicado y ligero. Su extrema suavidad lo hace aterciopelado al tacto y perfecto en cada estación.
- Transpirabilidad. El percal es altamente transpirable, termorregulador y ligero sobre la piel. Un tejido 100% natural ideal por su versatilidad, es el juego de sábanas ideal para todas las estaciones.
- Lavado. El percal está compuesto por un tejido grueso que garantiza sábanas de alta calidad, resistentes al centrifugado y más suaves lavado tras lavado. Se recomienda detergentes no agresivos y suavizantes delicados. Evita llenar la lavadora en exceso porque saldrán muy arrugadas y será difícil plancharlas.
Algodón: resistencia y calidad
El algodón es el tejido ideal para el juego de sábanas pero no todos son iguales. Existen diferentes procesos con acabados más o menos trabajados, y esto influye en el grado de comodidad y suavidad de la ropa de cama. El algodón puro es un producto de alta calidad, pero más simple y accesible que el satén y el percal.
- Elaboración. El algodón puro es un tejido suave y flexible, económico y duradero. El tejido de algodón de Dalfilo tiene 160 TC y está compuesto por una lona que le otorga resistencia y practicidad. Está formado por una lona 30/30 con un derecho y un reverso iguales que le confieren resistencia y practicidad.
- Textura. Aunque no pueda presumir de la misma textura del satén o el percal, incluso las sábanas de puro algodón 100% son envolventes y agradables al tacto.
- Transpirabilidad. El algodón es una fibra transpirable y resistente, que reduce la proliferación de gérmenes y microbios nocivos para el organismo y no provoca irritaciones.
- Lavado. Antes de lavarlas lee bien la etiqueta. No laves más a más de 40º C ni centrifugues a más de 800 rpm. Así evitarás que encoja.
Satén: elegancia y brillo
El satén de algodón es un tejido elegante y muy preciado, particularmente reconocible por su brillo, y que se obtiene a partir de un procesamiento específico del algodón. El satén está compuesto por un lienzo denso que le da al tejido su característico reflejo brillante y una calidad que perdura en el tiempo.
- Elaboración. El satén se obtiene a través de un procesamiento preciso del algodón: las fibras siguen un tejido de hilos principalmente de urdimbre con puntos de unión de trama sueltos según un arreglo regular y no consecutivo. El satén de Dalfilo es un tejido elaborado con hilos de algodón 100% natural y tiene 300 TC.
- Textura. El satén proporciona una sensación muy agradable al tacto. El tejido apretado le da a estas sábanas una sensación sedosa y agradable para la piel, de hecho las sábanas de satén son ideales contra las quemaduras solares.
- Transpiración. Comparado con el algodón y el percal, el satén es menos transpirable, pero igualmente recomendable precisamente porque sus hilos son de algodón natural, y por tanto el cuerpo está en contacto con fibras orgánicas y delicadas.
- Lavado. Las sábanas de satén deben lavarse con el debido cuidado, no a más de 30º C ni centrifugar a más de 800 rpm. Para un buen mantenimiento del tejido, se recomienda utilizar detergentes y suavizantes poco agresivos y preferiblemente naturales.
Ahora que ya conoces cómo tienen que ser las sábanas para dormir en verano, solo te queda ponerlo en práctica. ¡Felices vacaciones!